Monday, February 14, 2005

LA HORA 25

Esta es la ultima película de Spike Lee ese director negro que en los 90¨s nos deleitó con “Haz lo correcto” ese retrato urbano de la vida en el bronx.

Esta historia también está ambientada en NY pero en el NY post 11 de Septiembre, y toda la historia transcurre entre sus calles y parques, incluso mostrando como está ahora el área en donde estuvieron las torres gemelas.

He visto casi por casualidad 3 veces esta película y cada vez la encuentro más poderosa, la figura del dolor, del peso de nuestros actos y lo precario del futuro están magistralmente delineados en Monty Brogan el personaje central interpretado impecablemente por Edward Northon, lejos el actor con más carácter en la actualidad.

Este personaje, se enfrenta al último día en libertad, antes de internarse en la cárcel para cumplir condena por tráfico de drogas.

La belleza de esta película está en toda la enseñanza que deja la experiencia de este tipo que siempre tuvo la suerte a su favor, que con un enorme apartamento y una preciosa polola latina parecía tenerlo todo. Esta enseñaza transcurre lentamente, sin discurso moralista, sin escenas de arrepentimiento fácil y sin la obvia dramatización del suceso, sino que se desarrolla casi con dignidad, con rabia, y con mucho pero mucho miedo por el porvenir.

Particularmente hermosa es la escena en que Brogan frente al espejo del baño del bar de su padre un ex bombero irlandés, ve desfilar frente a sus ojos una galería de personajes propios de la ciudad más cosmopolita del mundo. Negros, judíos, chinos, indios, latinos e incluso irlandeses, a todos los maldice, a todos critica, a todos odia, pero a todos ama, porque en ellos a pesar de todas las costumbres y manías de cada una, está la riqueza de la ciudad, el esplendor de la vida, y lo peor, está la libertad que pronto verá interrumpida.

Un plus de la película, es la actuación de Philip Seymour un actorazo, recientemente descubierto por mi curiosidad (Magnolia, El talentoso Sr, Ripley) interpretando a un tímido profesor de secundaria.

Otra cosa interesante es la historia de Doyle, el perro que acompaña a Brogan en toda la película, pongan atención al comienzo del film, pues ahí queda claro el origen del nombre del animal.

Otra escena de antología transcurre en Long Island cuando Northon le pide a su mejor amigo que lo golpee para llegar con el rostro deformado a prisión y no parecer muy apetecible.

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